[HanRy] Sobrilla

SOMBRILLA

[HanRy]

Espere bajo aquella sombrilla a que llegaras. Espere toda la tarde. Tenía los pies mojados y tiritaba de frio. Aun así me quede allí.

Recordé el día en que me dijiste que te ibas.

“Me voy a quedar en China, Hen. Ya no estaré en SuJu. Seré solista aquí.” Y ese día no termine de entender que era lo que pasaba. Me entere un mes después, cuando tu contrato con la SM había sido anulado y yo tenía que ir a Japón con los demás para un concierto, mientras tu te quedabas a comenzar desde cero.

Los días a tu lado, que de por si eran pocos, con esta separación se hicieron casi nulos. La lluvia siguió corriendo, como la película que eran mis recuerdos.

“Hen, no te preocupes, deje el grupo no a ti, además, ambos estamos en China, y vivimos  a pocas calles ¿no?” El razonamiento era muy acertado. Mi residencia ‘permanente’ estaba en china, aun así, pasaba hasta ocho o nueve meses en Corea con el resto del grupo. Y solo me quedaba menos de tres meses para verte al año.

“Dentro de poco saldrá mi primer disco, ¿no es genial? Quizá nos encontremos en algún programa de música ¿no? SJ-M va a hacer su comeback ¿verdad, Hen? Por teléfono te oías entusiasta y animado, pero sabía que si eso pasaba te dolería vernos a todos, tus amigos.

“Salgamos, Hen. Vamos por un helado” Hace dos días me citaste. Sabias que yo estaba en China. “Si, hyung” solo eso escapo de mis labios “Esto es China, no Corea, llámame Gege” siempre eras infantil respecto a esa situación. Y pese a que era pleno agosto, con las lluvias y ventarrones, acepte salir por un helado.

La gente pasaba a mi lado, y como estaba cayéndose el cielo en gotas, nadie presto atención al más joven miembro de Super Junior M. La parada de autobús en la que me dijiste que esperara no tenía más que una silla de metal completamente mojada. Sentía los dedos de los pies entumecidos y fríos por el agua y tenía la certeza que vendrías. Lo prometiste. Aunque en este momento lo que menos me apetecía era un helado.

Las 5… las 6… las 7… las horas pasaron de forma rápida y sola. Ni siquiera me di cuenta cuando el cielo pasó de ese tono gris lluvia a una noche azul marino plagada por nubes negras. Tenía calados hasta los huesos. La punta de mi abrigo ya estaba completamente mojada por las gotas que rebotaban en el asfalto.

Espere bajo esa sombrilla.

Creo que me equivoque de día. Quizá no me citaste hoy. Quizá fue una cita para mañana. O quizá fue ayer y fuiste tú quien se quedo esperando. Volví a revisar el mensaje en el que me decías la fecha, hora y lugar. Pero no me había equivocado.

“El jueves, a las 5 en la parad del autobús frente a la tienda de helados.”

Mi teléfono parpadeo.

“Henry! Donde estas? Porque aun no llega a casa? Estas bien?” La voz al otro lado de la línea no era la que quería oír. Aun así, me reconforto oír a ZhouMi preocupado por mí.

“Voy para allá gege, no te preocupes mas” Los sollozos querían escapar de mis labios. ¿Ya que caso tenía que me siguiera protegiendo con la sombrilla? Deje que mis lágrimas se confundieran con la lluvia continúa y subí al siguiente autobús que paso.